Cap VII
Indeleble
Capitulo 7
Le pedí que se quedara pero no me escuchó
Se fue antes de que tuviera la oportunidad de decir las palabras para arreglar las cosas que se habían roto
Pero ahora ya es tarde, ella ya esta muy lejos
Cada noche lloras sobre ti para dormir
Pensando: “¿Por que esto me pasa a mi?
¿Por que todo tiene que ser tan difícil?”
Es difícil creer eso
No se terminara esta noche
Solo dame otra oportunidad para hacerlo bien pues tal vez no supere esta noche
Se fue antes de que tuviera la oportunidad de decir las palabras para arreglar las cosas que se habían roto
Pero ahora ya es tarde, ella ya esta muy lejos
Cada noche lloras sobre ti para dormir
Pensando: “¿Por que esto me pasa a mi?
¿Por que todo tiene que ser tan difícil?”
Es difícil creer eso
No se terminara esta noche
Solo dame otra oportunidad para hacerlo bien pues tal vez no supere esta noche
No me iré a casa sin ti
Won't Go Home Without You
Ben se despertó con el cuerpo suave y laxo de Zoey pegado al suyo, su piel tersa adherida a al suya fue suficiente para hacerlo arder de nuevo, pero esta vez, junto a aquel fuego abrazador llegó una sensación de plenitud que no había sentido jamás.
Parecía completamente perfecta dormida a su lado, no había la posibilidad de que ella se alejara ni de que comenzara a pronunciar los mil argumentos por los que debían mantener su “diplomática amistad”.
Dormida, el podía disfrutar de tener a la mujer que amaba en sus brazos, por que la realidad era que no podía negarlo mas, no estaba seguro de cómo o cuándo pasó y sinceramente le valía poco entenderlo, solo sabía que ella desde hace mucho tiempo permanecía bajo su piel, como una huella inborrable que permanecería hasta el fin de sus días.
La abrazó mas fuerte contra su cuerpo, tratando de encontrar las palabras correctas con las cuales explicarle todo lo que sentía, con las cuales convencerla de que debían de una vez por todas darle a su hija y a ellos mismos lo que se merecían.
Una familia.
Zoey despertó lentamente con su cuerpo firmemente pegado a otro, no tardó más de dos segundos en saber que eran las manos de Ben las que recorrían su espalda. Aquella sensación era tan diferente, era tan especial, que sus ojos se llenaron de lagrimas, sin pensarlo se aferró mas a su cuerpo mientras el besaba su cabeza.
-Despertaste-, murmuró mientras ella aun mantenía la cabeza contra su pecho, besó su piel ligeramente negándose a terminar ese placentero interludio.
Sus ojos registraron la tenue luz en la habitación, debía estar apenas amaneciendo, una parte de su cerebro sabía que debía levantarse y cambiarse antes de que Caroline despertara, pero aun así permaneció abrazada al único hombre que había amando en su vida, tal vez se permitiría soñar con una posibilidad, tal vez en esta ocasión las razones fueran las correctas, tal vez…
-¿Qué piensas?-, preguntó Ben en voz baja mientras ella sonreía tenuemente
-Aun no puedo pensar en nada-, le dijo con plena satisfacción femenina, mientras se enderezaba y besaba sus labios tenuemente, el forzó el beso y lo alargó hasta que ella murmuró su nombre, y lo miró separándose solo un poco.
-¿Y tu?-, preguntó Zoey mientras el le sonreía y acariciaba su cabello con una mano
Creyó que no le contestaría, tardó casi un minuto en hablar de nuevo.
-Pienso en que siempre estas ahí, para mi, siempre…
Ella se tensó, el lo sintió en cada poro de su piel, se obligó a tragar el nudo en su garganta y siguió
-Siempre que he necesitado, yo…siempre has estado ahí-, no eran las labras correctas, Ben lo supo, lo vio en sus ojos, pero, ¿de que otra forma podía explicarle que ella había estado en su vida desde que tenía memoria?, ¿que quería asegurarse de que jamás se fuera?
Ella se alejó por completo, sentándose en la orilla de la cama, llevándose parte de las sabanas consigo y dándole la espalda.
-Zoey-, llamó queriendo mirar sus ojos de nuevo, pero ella no se volvió.
¡Ella siempre era la que estaba ahí!, siempre la tonta, el clavo para su decepción amorosa, el clavo después de su divorcio, no más, no más.
Zoey limpió una lágrima de su mejilla y se obligó a calmarse antes de forzar una sonrisa en su voz.
-Eso hacen los amigos, siempre estar ahí-, terminó mientras lo oía levantarse, se envolvió en la sabana y comenzó a recoger su ropa.
-¿Amigos?-, preguntó el con voz desconcertada, casi dolida, ella no podía miarlo para comprobar su expresión, pero de verdad, ¿importaba?
-Se que me dirás que necesitamos hablar Ben, y juro que lo se, pero por favor, no ahora-, pidió ella mirándolo con otra sonrisa falsa.
-Zoey
-No te preocupes, al menos usamos condones-, bromeó antes de salir de la habitación
El resto del día fue un infierno para ambos, Ben trató de disimular de la mejor forma posible frente a Caroline, estuvieron la playa antes del desayuno y después prepararon su salida, el regreso a casa fue solo llenado por la conversación de su hija que los obligaba a ambos a permanecer activos e “interactuando”, todo terminó cuando al fin se quedo dormida en el asiento trasero del auto.
Su desesperación y desasosiego estaban dando paso a la furia, aun no entendía que era lo que había hecho realmente mal, por que aquellas palabras habían sido tan erróneas, deseaba que Zoey le explicara, que al menos le gritara el por que, pero solo se cerraba mas y mas.
Estacionó el auto fuera de la casa de ella y salió para después sacar a Caroline del auto y llevarla dormida hasta dentro, la dejó recostada en su habitación y bajó las escaleras para encontrar a la madre de su hija terminando de colocar sus maletas en la entrada, se miraron fugazmente sin decir nada, ella giró hacia la ventana y el se rascó la barbilla exasperado, dejó caer los hombros y caminó hasta quedar frente a ella, palmo a palmo.
-¿Quieres que me quede?-, para lo que sea, hablar, gritarme, ¿amarme?, de todo lo que pudo haber dicho, aquello era lo mas absurdo que sus labios habían pronunciado.
Zoey negó con la cabeza sin decir nada y el salió antes de perder el precario dominio en su autocontrol.
Iba a subir a su automóvil cuando miró la casa vecina, los celos y el temor se mezclaron haciendo que sus pies se movieran casi por voluntad propia, se encontró llamando a la puerta hasta que un confuso Tomas abrió.
-Solo lo diré una vez, espero que te quede muy presente, Zoey y Caroline son mi familia, será mi esposa, ¿correcto?, ella es mía-, terminó con la respiración agitada y los puños cerrados mientras el vecinito se cruzaba de brazos y se recargaba en el marco de la puerta solo sonriendo un poco, sin mucho humor.
-Al menos no eres un idiota completo-, susurró mientas Benedict fruncía el ceño
-Ya has perdido mucho tiempo y ella no te lo pondrá fácil, créeme lo se, y por mi desearía que jamás lo logras, pero esto es por ella y esa hermosa hija tuya, así que depende cuanto mas quieres que Zoey se salga con la suya-, terminó Tom antes de lentamente cerrar la puerta, Benedict se quedo estático en el porche de aquella casa desconocida y lentamente volvió a su auto, reprimió el impulso de ir hasta ella de nuevo y forzarla a hablar, forzarla a volver a alejarse de el, si es que podía…
Pero al final se fue a su departamento y destapó una botella de cerveza en su sala vacía, cerrando los ojos y deseando que algo o alguien le hicieran ver las palabras correctas.
Le mostraron el cunero donde su pequeña bebe dormía, era una cosa tan diminuta, la enfermera le hizo colocarse una bata de hospital y lo llevó hasta ella, se la pasó entre los brazos y la sostuvo con manos temblorosas, le sonrió y besó su frentesita mientras por primera vez después de todo aquel remolino de acontecimientos se sentía en paz.
Pasó varios minutos con su hija y luego caminó hasta la habitación de Zoey, no sabía a bien, cuales era las palabras correctas, no sabía que debía de decirle, o que seguía para ellos, así que solo se quedo al pie de la cama viéndola dormir y tratando de no hacer ruido
Después de varios minutos se acercó titubeante rodeando la cama, y quito un mechón de cabello rubio nuevamente del rostro de la madre de su hija…
Y quizás por primera vez desde que era un niño habló desde su corazón
-Gracias Zoey-, susurró mientras reía un poco nerviosamente
-La realidad es que estaremos juntos, ¿no?, en todo esto…te digo un secreto, no hubiera deseado a nadie mas para esta locura, a nadie…
Zoey recogía los pocos platos de la cocina mientras miraba el reloj de pared, necesitaba ir a la cafetería – como todos los lunes-, pero no encontraba las fuerzas para salir y seguir, con…su vida
De no ser por que Caroline se había despertado y acudido a su habitación para sonsacarla de hacer un desayuno repleto de hot cakes y mermelada de mango, Zoey aun seguiría en la cama, si, era patética, pero en su interior una vocecita gritaba que podía bien tomarse un día y llorar por todo lo que su imaginación desbocada había causado, todo el dolor que aun sentía salir de sus pecho, negó con la cabeza y fue hasta la estancia donde su hija miraba la televisión, sonrió y sin importar que, agradeció cada día que la tenía con ella, ahora, como el primer día que vio a Benedict con sus pequeño bebe en brazos, debía recordarse que Caroline era el mejor regalo, ella debía estar feliz por ello…y si se esforzaba, debía ser suficiente.
El sonido de un motor aparcando la distrajo mientras iba a hacia la entrada y su espalda se tensaba al observar el auto de Ben estacionarse fuera de su casa, se abrazó a si misma, y salió hacia el porche sin alertar a su hija, el la miró y con el rostro imperturbable caminó hasta que ambos quedaron frente a frente, un poco alejados de la puerta, lo suficiente para no llamar la atención de la niña
-Ben esto no…-, comenzó Zoey centrándose en un punto mas allá de su cabeza, pero el solo negó y se acercó enmarcando su rostro y dándole un suave beso en los labios, la fuerza de sus manos era opuesta a la ternura de sus labios.
-Mi corazón necesita hablar contigo, y por Dios que vas a escucharlo, si después tienes aun argumentos, serán bienvenidos y escuchados-, habló en voz baja con su aliento chocando en sus labios, lentamente la soltó alejándose un paso, pero solo para que ella pudiera tomar la decisión de quedarse y escuchar.
No se movió, no podía hacerlo.
-Te amo Zoey, fui un idiota aceptando que me alejaras hace 7 años, fue mucho mas fácil y dejé que tu tomaras la decisión, pero no ahora-, terminó mientras ella tragaba el nudo en su garganta y negaba con la cabeza.
-Fue lo correcto, lo que pasó entre nosotros fue solo un evento esperado, necesitabas a alguien que sacara el dolor de la traición, pudo ser cualquiera-, terminó ella mientras el se aceraba sin tocarla.
-Pero fuiste tu y jamás podré pronunciar lo agradecido que estoy por ello, quizás en ese momento hubiera sido suficiente cualquiera, pero ahora, en este momento, eres tu Zoey, te necesito cariño, necesito a la mujer que amo, te necesito tanto, no por los cuernos de una ex novia o la falta de cerebro de una ex esposa, te necesito por que tu fuiste hecha para mí-, terminó el acariciando una mejilla con el dorso de su mano.
-¿Por cuánto tiempo?-, sollozó ella, limpiándose las lágrimas casi furiosamente.
.Para siempre.-, sonrió el antes de besarla, y ella devolvió el beso aferrandose con la misma intensidad
-Benedict-, musitó ella abrazándolo.
-Estaba aterrada de que tu no me amaras como yo lo hago, me bastaba con Caroline y mirarla cada día, debía bastarme, yo…-, el negó con la cabeza y la silenció con otro beso largo y profundo,
-Lo se, cariño, lo se
-No quería ser más una consecuencia…
-La primera vez que te besé lo hice para olvidar, ahora cada vez que te bese será para grabarte tan hondo que no quede nada mas-, terminó Benedict mientras Zoey asentía y lo besaba sonriendo, decidiendo que la visita de los lunes tendría que esperar, adentro la esperaba su hija, miró hacia Ben y se prometió que nadie la sacaría a ella de su corazón, su marca era indeleble.
FIN
Cel.
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10 Comentarios
perfecto cel!
ResponderEliminarMis respetos, w.w
ResponderEliminarCómo mierda podi terminar todas tus novelas, y yo llevo casi un año sin actualizar, ajaja Dios, perdóname Anton pero ye engañé con Ben, ajajjaja.
Que hermoso que finalmente resolvieran sus diferencias, es decir, vamos...
Zoe tenía fuertes razones para dudar de él, no es que se lo pusiera difícil, era que él había estado ciego. Pero, finalmente el amor triunfó. w.w
ooo ababo T.T BONITO FINAL. !
ResponderEliminarNo hay palabras, le kedo genial, me gusto ene...
ResponderEliminarconcuerdo 100% con usted en indicar ke los hombres no hablan correctamente, aveces esperamos ke digan algo y ellos salen kon otra cosa, no se si se sera su falta de confianza o el temor a kedar desprotegidos, pero es mucho mejor dejar hablar al cuerpo en vez de la mente....
saludos ^^
hermoso!!!
ResponderEliminargenial!!
fantastiko!!!
m encanto!!!!
Me encanto el final!
ResponderEliminarJuntos, juntitos.... al fin! XD
Tanto tiempo separados y solo por no dar a conocer sus sentimientos :(
Besotes, Dany
perfecto!! me gustoo!
ResponderEliminarholaa ohh que epectacularrr el final...me encantooo las cosas que le dijo ben que la amabaa fue tan tiernooo y buenoo ahora tienen un futuro juntosss fue hermosooo el final!!!! uihh ya me habia agarrado miedo cuando ella no queriaa hablarrr pero bueno menos mal que el insistio je! y cuando le fue a hablar a tom jee me causoo muchaaa graciaa estabaa celosoo y queria dejar las cosas claras!!! me re gustooo --- y noss seguimossss leyendooo!!!! besoss!!!!
ResponderEliminarLlorando :'( Muy bueno el final :D
ResponderEliminarmuy emocionante y tierno final , me encanto la historia
ResponderEliminarDeja que fluya...