Under Breath - Capítulo 8


El apartamento que compartíamos con Eb estaba convertido en un desastre, el sofá estaba partido a la mitad y un reguero de plumas flotaba en el aire.
Quedé congelada en mi sitio cuando observé la escena que se llevaba a cabo en el centro del salón, con la cabeza apoyada contra la pared y ambas manos en los bolsillos, Eb se enfrentaba cara a cara con un ángel.
Tenía la misma altura que Eb, más corpulento y ojos fríos como el mar, también tenían el color de éste último en común. Llevaba puesto unos pantalones de tela grises y zapatos negros, tan brillantes que apostaría a que podía ver mi reflejo en él, el bastardo llevaba el torso al descubierto y dos alas de aproximadamente cuatro metros de diámetro sobresalía de su espalda.
Era algo ridículo de ver, dado el tamaño de nuestro apartamento sus alas se encontraban dobladas, intentando encontrar sitio en las esquinas del lugar.
Me preguntaba si el caos se debía a que le había costado trabajo moverse por el sitio o, lo más probable, habían estado luchando.
—¿Qué está haciendo acá?
Él no me respondió, en realidad ni siquiera se dignó a mirarme, en cambio continuó hablando con su interpelante como si no ocurriera nada, como si no corriéramos peligro con cada segundo que pasaba.
—Eb —insistí, apretando mis dientes.
—Ahora no Cali. Por favor, déjanos solos.
Era la primera vez que Eb me hablaba de ese modo. Por supuesto, había empleado antes la palabra «por favor», la mayor parte del tiempo a modo de broma o para sacarme de quicio. Esta vez en cambio lo decía en serio, decidí que estaba realmente preocupado o bien, estaba dándome la mejor actuación de su puta vida.
Esperaba que se tratara de la segunda.
Observé mejor la apariencia de Eb, sus pies descalzos estaban salpicados de polvo, lo que inmediatamente hizo que me preguntara de dónde venía. El hecho de que en el último tiempo yo me viera en la obligación de asistir a clases le daba  a Eb un montón de tiempo a solas, no es que importara mucho de todos modos, conmigo o sin mí, él se las arreglaba para desaparecer sin dar explicaciones.
Asentí, porque me di cuenta de que no podía hablar, no es que no encontrara las palabras exactas. Al contrario, tenía en mente un montón de cosas que le vendrían perfecto al momento, como «jódete» por dar un ejemplo,  en cambio, me encontré girando en ciento ochenta grados y caminando de vuelta a la salida de nuestro apartamento.
Eb me estaba controlando, por supuesto, pero no sin que antes yo le diera un último vistazo al ángel.
Una vez que la puerta se cerró a mis espaldas, cerré los ojos y dejé que mi mente tomase el control de la materia.
Aterricé en la playa.
Inhalé profundo el aroma a sal y agua marina, mientras me quitaba los tacones y daba tiempo a mis pies para adaptarse a la arena.
Podía escuchar el ruido del mar como si estuviera sumergida en él, pero no podía hacerlo, me estaba prohibido, al igual que el cielo.
La tierra y el fuego era el único elemento que se me permitía apreciar, si es que se podía llamar disfrute a sentir la lava corroyendo la carne de tus dedos.
De repente, fui consciente de un sonido, algo leve y agudo, mis dientes castañeaban. Toda yo estaba convertida en una masa temblorosa.
El frío que me sobrevino sepultó todo indicio de distracción que pudiera haber encontrado en aquel lugar paradisiaco, en cambio, una sensación viscosa se apoderó de mí, similar a la que sentí aquella noche en El Hades, cuando dejé escapar el alma de David.
Casi de forma inmediata, el cielo se abrió y una nube de origen sospechoso se alojó justo en frente de mí obstruyendo mi visión del sol. Observé a todos lados, buscando un posible refugio, pero donde sea que posaba mi vista todo lo que se veía era arena, blanca y áspera arena.
Intenté concentrarme, para transportarme a otro lugar, un desierto, la selva, algún centro comercial, pero no importaba cuánto lo intentase, estaba demasiado débil para lograrlo, sin mencionar que se me hacía imposible concentrarme en algo que no fuese Eb, él estaba solo en nuestro apartamento, no importaba lo tranquilo que lucía cuando me pidió que lo dejara, él no saldría vivo de esta, ambos lo sabíamos.
Una a una las gotas fueron cayendo sobre la playa, manchando el gris, carcomiendo mi carne.
—Maldición —, jadeé, mientras el ácido abría nuevas heridas en mi cuerpo. La lluvia y yo no nos habíamos enfrentando desde que desperté medio muerta en el bosque hace ya un par de semanas.
El suplicio duró lo suficiente para hacerme sangrar y gritar, pero no caí de rodillas, aún no estaba lo suficientemente débil ni desesperada. Enfrenté mi castigo con toda la dignidad que podía, sin importar que pareciera un zombie. Sin embargo, cuando el sol salió otra vez iluminando como si nada hubiera ocurrido, estuve más que tentada de gritar un par de verdades… O blasfemias, según a quién le convenga.
Pasaron dos largas horas, antes de que consiguiera arrastrarme hasta la orilla, sabía que el agua de mar me haría gritar, también que lo tenía estrictamente prohibido, pero a veces la cura es peor que la herida.
O eso quise creer cuando dejaba que el mar lamiese los restos de carne quemada que colgaban de mi cuerpo y ahogaba un sollozo cuando sentía desprenderse las uñas de mis pies.
Mientras aguantaba el mal necesario, comencé a preguntarme cuánto duraría. Cuánto tiempo más seria capaz de soportar esta copia barata de lo que algunos llaman vida.
A lo lejos, en el cielo, un par de sombras se mezclaba con las de las gaviotas, no emitían el ruido de estas últimas y parecían más grande, a ciencia cierta no sabría decirlo, lo que quedaba de mi párpado izquierdo acababa de caerse y el izquierdo se había desprendido cuando aún estaba en la arena.
Sorbí un poco de agua cuando una ola inesperada me azotó de vuelta en la orilla, el agua marina llenó mi lengua y paladar, desgarrando todo a su paso.
Gemí de dolor y solté un par de palabras sin sentido, era difícil hablar cuando te quedaban pocos dientes y tu lengua estaba a medio lapidar. Sin embargo, por alguna extraña razón, mis ojos captaron otro atisbo del cielo. Ya no era una sombra, de hecho, parecía más grande y aterradora que una simple gaviota, las gaviotas no asustaban, jadeé, las gaviotas no te hacían temblar.
Me esforcé por cerrar los ojos  y regresar a un lugar seguro, excepto que parecía ser que ya no existía tal lugar.
La luz brillante continuó acercándose, sus enormes alas se extendieron cuando giró en un perfecto ocho en el cielo, a mi alrededor.
Un ángel, comprendí consternada, deduciendo que el tipo que estaba en el apartamento había acabado con Eb y ahora venía por mí.
¿Sería por culpa de David? ¿Podía ese chico ser capaz de armar tan grande alboroto?
Lo dudaba, pero no tenía otra explicación.
—¡Maldición! —chillé cuando doblé mis rodillas y las rodeé con mis manos. El ángel giró un par de veces antes de aterrizar frente a mí, su presencia, su olor, todo en él puso mis pelos de punta. Recién entonces reparé en una horrenda diferencia, sus alas, eran el triple de las de un ángel normal, también su cuerpo y fuerza estaban aumentados. Él era más corpulento y más alto, era no era un ángel, sino un arcángel.
No me atreví a levantar la cabeza, si iba a morir no quería ver los ojos de mi verdugo.

—¿Cali?—, alcanzó decir antes de que mi garganta destrozada se llenara de algo caliente y yo empezara a toser ensuciando su pantalón beige con mi propia sangre.


P.d: siento mucho la demora, oh DIOS, no tengo palabras para explicarme, para disculparme. Sólo me resta agradecer su paciencia y fidelidad.
Muchos besitos y bendiciones.
P.d2: disculpen las fallas, mañana edito! 
Les recuerdo que la novela tiene facebook oficial: https://www.facebook.com/pages/Under-Breath/121178244671249

Publicar un comentario

10 Comentarios

  1. ay! no, no, no...T-T quiero seguir leyendo..D:! te juro que tus capítulos se me hacen re cortitos...:_ (no es queja, xD)....besos n_n

    ResponderEliminar
  2. Lisselot20:17:00

    es cosa mia o este fue muy cortito?? :) pero igual quede encantada gracias!!

    ResponderEliminar
  3. belu_juanes11:59:00

    ahhhhhhhhhhhhh noo liss como lo puedes dejarr asii es el verdadddd pro dioss que aparezca nuestroo arcangel sexy jajaj!!!! me encantoo el capiiii!!! extrañaba leerte pero se entiende que todos tenemos ocupaciones y cosas tambienn que hacer...!! besos enormess y buen fin de semana pasalo lindoo!!!  besos!!

    ResponderEliminar
  4. Nuestrotintero21:50:00

    Gracias mi niña, ya viene más info sobre el arcángel.

    ResponderEliminar
  5. Nuestrotintero21:50:00

    Tal vez se deba a que la letra es más pequeña, o quizá me corté un poco. 

    ResponderEliminar
  6. Nuestrotintero21:50:00

    Intentaré enmendarme con el próximo. :D

    ResponderEliminar
  7. :Q__ este tema me eriza los vellos... Love to blame..*-* me enamore del tema Liss..:* 

    ResponderEliminar
  8. Nuestrotintero21:58:00

    ehehhe, gracias, es perfecto ¿No?

    ResponderEliminar
  9. AAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH carajo me dejaste emocionada!!!!! carajo!!! buenisimo capitulo!!! los alados ya se metieron!!! ¿¿¿¿¿que le hicieron a Eb???? jeje cuando digo los alados me los imagino llenos de sal... lossalados jajajajajaja ok no me hagas caso.... suelo desvariar a estas horas....
    Me encantó el capitulo Liss hace mucho que no lo leia!!! lo extrañaba!!!

    ResponderEliminar
  10. AAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH carajo me dejaste emocionada!!!!! carajo!!! buenisimo capitulo!!! los alados ya se metieron!!! ¿¿¿¿¿que le hicieron a Eb???? jeje cuando digo los alados me los imagino llenos de sal... lossalados jajajajajaja ok no me hagas caso.... suelo desvariar a estas horas....
    Me encantó el capitulo Liss hace mucho que no lo leia!!! lo extrañaba!!!

    ResponderEliminar

Deja que fluya...